Cuando estás cansado de luchar, recuerda que Dios ha tomado
nota de todos tus esfuerzos e intentos.
Cuando ya no te queden lágrimas debido a la angustia y el
dolor que sientes, recuerda que Dios las ha contado todas.
Cuando tienes la impresión de que tu vida se ha detenido y
simplemente pasa el tiempo, recuerda que no esperas solo, Jesus espera contigo.
Cuando te sientes solo y olvidado por tus amigos, recuerda
que Jesus está a tu lado.
Cuando has tratado por todos los medios de salir adelante y
piensas en rendirte, recuerda que Él (Jesus) es el camino… Dios es la respuesta
y su Espíritu nuestra El que nos llena completa y Protege.
Si de repente algo se despierta en tu interior y sin motivo
aparente eres capaz de mirar y entender la vida desde otra perspectiva déjate
llevar su Espíritu obra en ti. Si de pronto empiezas a ver senderos donde antes
no habías visto nada, recuerda que Dios lo sabe, Jesus nos acompaña y su
Espíritu nos lo revela y todo cobre sentido y propósito.
<Gálatas 4:4 (TLA) Ahora, como ustedes son sus hijos,
Dios ha enviado el Espíritu de su Hijo a vivir en ustedes. Por eso, cuando
oramos a Dios, el Espíritu nos permite llamarlo: «Papá, querido Papá».>
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