Por experiencia digo ¡Cómo nos cuestan las esperas! ¡Qué
poco ejercitamos la paciencia en este mundo agitado en el que vivimos…!
Apuramos a nuestros hijos en su crecimiento, apuramos al
chofer del taxi… nosotros mismos hacemos las cosas apurados, y no se sabe bien
por qué lo hacemos… pensamos o creemos que es mejor, pero si embargo el fruto
temprano no esta madurado, cortamos todos sus beneficios posteriores por
nuestra impaciencia.
Luego perdemos la fe cuando los resultados no se dan en el
plazo que esperábamos, abandonamos nuestros sueños, y nos generamos patologías
que provienen de la ansiedad, del estrés… Y ¿Para qué?
Aunque no entiendas hoy tu situación aprende a esperar, tal vez estés en el proceso de germinación y si no dejas acabar esta parte del proceso seguro no llegaras a ver el
fruto.
Propongámonos tratar de recuperar la perseverancia, la
espera, la aceptación. Y hagámoslo en el consejo de Dios, a través de su
palabra. Pero recuerda primer requisito esperar todo tiene su tiempo.
Lucas 8:15 8:15 “Mas
la que cayó en buena tierra, éstos son los que con corazón bueno y recto
retienen la palabra oída, y llevan fruto en paciencia”
Lucas 21:19 “En vuestra paciencia poseeréis vuestras almas”
Romanos 5:3 “Y no sólo esto, mas aún nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia”
Hebreos 6:12 “Que no os hagáis perezosos, mas imitadores de aquellos que por la fe y la paciencia heredan las promesas”
Lucas 21:19 “En vuestra paciencia poseeréis vuestras almas”
Romanos 5:3 “Y no sólo esto, mas aún nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia”
Hebreos 6:12 “Que no os hagáis perezosos, mas imitadores de aquellos que por la fe y la paciencia heredan las promesas”
Siembras la semilla, la abonas, y te ocupas de regarla
constantemente. Y después ya sabes se paciente espera el fruto llegara. Pídele a
Dios hoy paciencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario