SOMOS HIJOS DE LA PROMESA

SOMOS HIJOS DE LA PROMESA
El cristianismo se basa en una promesa y esta es que Él vendrá nuevamente a la tierra y nos llevará para estar con Él para siempre. con la Fe y paciencia alcazamos la promesa. Nuestra esperanza se basa en esa promesa y esta no es promesa de hombre el cual es finito y quebrantable, si no de nuestro Dios es el gran hacedor y cumplidor de promesas. En Su palabra, nuestra Biblia, encontramos una colección de promesas que nos fortalecen y se van cumpliendo a medida que esperamos por su promesa más grande: Apocalipsis 22:20. El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús.
Así que hermanos : Salmo 27:14. "Pon tu esperanza en el Señor; ten valor, cobra ánimo; ¡pon tu esperanza en el Señor!" - Si esperas en el Señor, podrás decir como el salmista: Salmo 62:5. "Sólo en Dios halla descanso mi alma; de él viene mi esperanza." - ¡resistire! - Isaias 40:31. "Pero los que confían en el Señor renovarán sus fuerzas; volarán como las águilas: correrán y no se fatigarán, caminarán y no se cansarán." - y asi mi hermano hasta que El llegue ¡que llegara!
Hoy su espíritu es con nosotros y nosotros con El, di Amén y Amén; Así que Amigo. - Hebreos 10:23. "Mantengamos firme la esperanza que profesamos, porque fiel es el que hizo la promesa."
Entonces se cumplirá:
Isaías 25:9. Y se dirá en aquel día: He aquí, éste es nuestro Dios, le hemos esperado, y nos salvará; éste es Jehová a quien hemos esperado, nos gozaremos y nos alegraremos en su salvación.