<Colosenses 2:9-10 (NVI) Toda la
plenitud de la divinidad habita en forma corporal en Cristo; y en él, que es la
cabeza de todo poder y autoridad, ustedes han recibido esa plenitud.> asique
no hay excusa, si le creo a Él y ando conforme a El tendré victoria en todo lo
que acontezca en mi vida, pero no por mi si no por El en mí y yo en El. (Tu
Señor me haces vencedor)
Yo no soy perfecto; Soy imperfecto en el amor;
porque sólo amo a los que me gustan, cuando debería amar a todos… Soy
imperfecto en mis razonamientos, porque sólo entiendo lo que me conviene, y a
veces pienso que la razón me pertenece.
Soy imperfecto en la comunicación; porque
creo que sólo lo mío es importante, cuando hay tanto que escuchar… Soy
imperfecto en mi manera de ver; porque sólo le prestó atención a lo que para mí
es bello, aun sabiendo que todo tiene su lado hermoso.
Soy imperfecto en mi manera de creer;
porque creo lo que me interesa, y no sé esperar confiadamente… Soy imperfecto
en mi madurez; porque me aferro sólo a lo que tengo y conozco.
Soy imperfecto a la hora de bendecir al
prójimo; porque me avergüenza que sepan que tengo fe, aun sabiendo que cada vez
que lo hago, sea de la forma que sea, mi corazón se llena de gozo y de vida…
Señor, ayúdame a superar mis imperfecciones,
“Señor, hoy recibo tu palabra y ya no soy yo más tú eres en mí y yo en ti “Todo
lo tengo ganado en ti” (Tu Señor me haces vencedor) a ti sea toda la Gloria
Amen.