¿Por qué te confundes y te angustias ante los problemas de
la vida? Tu parte es hacer todo cuanto está en tus manos para tratar de
solucionarlos, pero si después de hacerlo no lo has podido lograr, confía y
déjame obrar a mí…
Soy Dios el Señor, para mi nada es imposible, déjalo todo en
mis manos, ira mejor si se resuelve según mi voluntad… ¡confía en mí!
No te desesperes, no ores como si trataras de exigirme y
obligarme a que cumpla tu deseo. Solo dime con calma y confiadamente cuál es tu
necesidad y espera… No estropees mis planes queriéndome imponer tus
maravillosas ideas… ¡confía en mí!
Descansa en mí y deja tu presente y tu futuro, en mis manos.
Lo único que necesito oír de ti es: “Jesús, yo confío en ti”
Si logras poder confiar plenamente en Mí, a pesar de las
circunstancias, de los problemas y de las angustias que se generan porque las
cosas no ocurren como y cuando tú esperabas, llegará el día en que te darás
cuenta de que mi propósito principal no es solamente cambiar las circunstancias
que te preocupan, sino transformarte a ti. ¿Confías en Mí?
La palabra dice: <Mateo 8:11 (TLA) Oigan bien esto: De
todas partes del mundo vendrá gente que confía en Dios como confía este hombre.
Esa gente participará en la gran cena que Dios dará en su reino. Se sentará a
la mesa con sus antepasados Abraham, Isaac y Jacob.> no es para una raza no
es para un color, ni una lengua… es para todos los que ponen su confianza en
Dios nuestro Señor.
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