JUAN 9:4. Debo hacer las obras del que me envió mientras es
de día.
Esto Jesús lo sabia y compartía con sus discípulos, comunicándoles
el propósito por el cual Él estaba aquí, y les exhortaba diciendo ser
diligentes no dejéis para luego este momento aprovecha el día.
PROVERVIOS 13:4. El alma del perezoso desea, pero nada
consigue, mas el alma de los diligentes queda satisfecha.
Ser obediente al Señor es bendición para nuestra vida, lo
mismo que Cristo obedeció al Padre, nosotros obedezcamos también, deja que hoy
su presencia llena de toda bendición sea sobre ti. ¡El que tiene oídos para oír,
oiga!
JUAN 4:34-36. Mi comida es hacer la voluntad del que me
envió y llevar a cabo su obra. ¿No decís vosotros: “Todavía faltan cuatro
meses, y después viene la siega”? He aquí, yo os digo: Alzad vuestros ojos y
ved los campos que ya están blancos para la siega. Ya el segador recibe salario
y recoge fruto para vida eterna, para que el que siembra se regocije juntamente
con el que siega.
El Señor nos dice una y otra vez ser diligentes, aprovechar
lo que Papa Dios os ha regalado, no lo desperdicies ni lo guardes si no úsalo.
LUCAS 19:13. ….Negociad con esto hasta que regrese.
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