Yo puedo decir también que soy ese hijo entrado a razones:
<Lucas 15:32. Este… era muerto, y ha revivido; se había perdido, y es
hallado.> y esto lo puedo decir, porque creo en mi padre Dios, creo en su
palabra y la recibo a través de la Fe en Jesucristo, mi salvador.
No hay peor veneno para el alma que la incredulidad; Si
usted reconoce que hasta ahora se ha alimentado de ese veneno, aún hay
esperanza. Clame a Dios « ¡Oh Dios, salva mi alma!». Después de este día, hoy muchos
servimos a Dios.
Dios nos respondió y
hoy podemos decir soy libre, la paz llena mi Corazón, su palabra se hace real
en nuestra vida pues EL dijo: <Ezequiel 36:26 “Os daré corazón nuevo… y
quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne”>
A aquel que lo busca entrando a razones, EL le da un corazón nuevo y la
seguridad de su Amor.
Con su nuevo Corazón también tenemos nueva vida la cual nos
es necesaria recibirla y debemos hacerlo a través de Jesucristo, pues él nos
dice: <Juan 3:3-5 “el que no naciere de nuevo… no puede entrar en el reino
de Dios”.> Sólo quien acepta a Jesucristo como su Salvador tiene la vida.
¡Sentimos el nuevo corazón y con él, el gozo de la
salvación, el gozo del Señor el cual conmueve todo nuestro ser! Corazón trasformado
soy.
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